martes, 16 de octubre de 2012

El "riesgo" de la carrera política...





Concejal detenido en Fuenlabrada, denunciado por corrupción en 2008

José Borrás, en una imagen de la web del Ayuntamiento de Fuenlabrada.
José Borrás, en una imagen de la web del Ayuntamiento de Fuenlabrada.


La noticia comentada por El Mundo a varios años vista de las elecciones municipales, me hace pensar en voz alta una reflexión sobre las motivaciones y riesgos que están acorralando a la llamada "clase política". Leemos primero el artículo del Mundo: 

El concejal de Fuenlabrada hoy detenido por presunta corrupción en la 'Operación Emperador', la redada contra una supuesta red de blanqueo de capitales, ya había sido vinculado a hipotéticas tramas corruptas en 2008, en una denuncia por estafa contra un funcionario municipal destapada por ELMUNDO.es.

Dicho funcionario se habría quedado con 108.000 euros de dos particulares que concurrían a una subasta hipotéticamente amañada, y en diversas grabaciones se vinculaba al fraude a Borrás, entonces concejal de Participación Ciudadana, Industria y Empresas Públicas, y hoy también con competencias en Seguridad.

De aquellos 108.000 euros habría cobrado comisiones ilegales Borrás, según una grabación al funcionario presuntamente corrupto a la que tuvo acceso entonces este diario. El denunciado llegaba a decir en la grabación: «No sé si sabéis lo que pasa en los ayuntamientos y en las administraciones locales, que hacen lo que les sale de las narices».

Borrás, uno de los históricos del socialismo fuenlabreño, lleva en cargos municipales y vinculado al poder en Fuenlabrada, donde el PSOE gobierna desde 1978, más de 20 años. 

 El fraude denunciado en 2008 arrancaba cuando un funcionario municipal invitaba a dos particulares a participar en la subasta de «dos viviendas a buen precio», que en realidad eran las sedes de dos asociaciones vecinales que se trasladaban: una de ajedrez, otra de ex alcohólicos.

Los denunciantes realizan una grabación al funcionario en la que éste vinculaba directamente a Borrás:

- No sé si sabéis lo que pasa en los ayuntamientos y en las administraciones locales, que hacen lo que les sale de las narices. Te lo dan a ti [el piso] porque a él [al concejal de turno] hay que darle dos, tres o cuatro millones, o con lo que se quede. ¿Me entiendes lo que te quiero decir? Y los da así a dedo a la mitad de la gente...

-Porque el concejal se queda con dinero, ¿no?- le pregunta directamente uno de los denunciantes.

-Sí, ¿me entiendes?- contesta él.

En otro momento, para asegurar a los denunciantes que se les devolverá su dinero, Marina les dice: «Tranquilos, que yo con Borrás lo tengo todo hablado"...



Y esta es la reflexión que me suscita: 

"Se habla de históricos del partido X. ¿ Cuales fueron el antecedente de estos avispados militantes que en la década de los 70, su compromiso no estaba mas allá se sus posturas -meritorias- en tareas poco "políticas" pero subordinadas a los "aparatos" organizativos, ya que no habían sobresalido nunca en los aspectos ideológicos empleados contra el franquismo...

Se apuntaron al cansancio de una ciudadanía harta  de tantos gobiernos municipales vinculados con la "derecha", arropando como maquillaje un quehacer interesado y mucho, a juzgar por la innumerable lista de escándalos que ya no nos sorprenden y en los que destacan por igual "históricos de la derecha e históricos de la izquierda...

Debieran cuidarse muchos las futuras "candidaturas" para no convertirse la "vocación de servidor público" en una empleomanía que justifique en el futuro cualquier "pelotazo"...

La ética que se nos vende justifica que el que no hace.... es tonto.    

Se necesitan políticos y partidos honestos, y si no es posible el sistema no vale. Demasiadas bajas han causado las originales políticas de los últimos años: grandes infraestructuras financiadas con dineros no producidos, caprichos como el aeropuerto de Ciudad Real, y pretensiones de Aves por todos los lugares...

Se está pasando factura a los partidos responsables, pero... cuidado con los "listos" que pueden volver a distorsionar el nuevo mensaje.

Dario Pozo Ruz.
  


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