"Vivir
en un mundo de contrariedades, sumidos en un proceso de decadencia de
valores, parece ser es el fatal designio que nos ha tocado vivir".
Unos
parece que prodigan aquel viejo refrán: “ a río revuelto, ganancia de
pescadores” como auto-justificación del no hacer nada para enfrentarse
con creatividad al reto del bien hacer , son como caldo de cultivo de
arribistas, “chaqueteros”, hoy blancos, mañana azules y pasado rojos...
No
solo en la política encontramos arribistas, también en el deporte, en
la escuela, en la universidad, como que para ganar la carrera todo vale,
empujones, zancadillas o doparse …
No
solo se vive una sociedad con crisis de valores, hay también una crisis
de libertad y de los factores que no permiten el desarrollo de esta.
Como
decía Erich Fromm hay un sentido mas allá de la “libertad para” es el
sentido de “libertad de”: determinación instintiva para actuar con
independencia y racionalidad, lejos de los mecanismos de evasión que
resultan de la inseguridad del ciudadano que vive aislado.
Si
nos limitamos a “vegetar” nos conformaremos con satisfacer las
necesidades biológicas y a lo más juzgar y criticar, pero, eso sí, “sin
dar la cara”, sentados en un cómodo sillón ante el televisor.
Separarnos
unos pasos de la masa informe y pensar por nosotros mismos si que es un
ejercicio de libertad, y como en la gimnasia si se ejerce se beneficia
el cuerpo entero.
Hay
que abandonar algo el refugio confortable material y aprender a
escuchar, hablar, conocer, porque si no lo hacemos otros decidirán por
nosotros y nos veremos reducidos a refrendar con un simple voto la
continuidad de un “statu quo” que conduce a ninguna parte.
Hay
que huir de la evasión, o nos comprometemos a la búsqueda de la
seguridad sin renunciar a nuestros principios o nos dejaremos arrastrar
como reptiles.
No
hay que tener miedo a ser diferentes, siempre que seamos capaces de
“ser”: de lo contrario no habríamos tenido hombres como Newton, Galileo o
Juan Bosch.
POR DARIO POZO RUZ
Publicado el 28-X-2012 en Ecos del Sur. Rep. Dominicana.
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