" Parece que es algo mas que una - serpiente de verano - por debajo se trata de un caso de buena fe en un mundo que por desgracia ha ocasionado un linchamiento social de una anciana que con buena fe trató de ayudar con voluntariedad.
Parece ser que el hecho ha provocado una gran afluencia de visitantes a Borja, que puede verse beneficiada por un infortunio, del que se dice será mejor dejarlo en el estado que Dña. Cecilia causó.
Que Dios bendiga a Dña Cecilia por su buena intención y que el viejo proverbio "no hay mal que por bien no venga" y nuestra sociedad que hasta perdona a terroristas y corruptos, sea mas benigna ante ella." Aplaudimos el comentario de una buena persona sensible:
" Me gustaría conocer el nombre y apellido de los cobardes de Twitter y
de otras redes sociales que se apuntan a cada linchamiento, a cada
broma fácil, siempre en el tono más vulgar y exhibiendo sin rubor la más
lastimosa de las mediocridades. Me gustaría saber a qué se dedican y
cómo son sus vidas.
Su última víctima ha sido la señora Cecilia Giménez, zaragozana, que
ha intentado restaurar por su cuenta y sin demasiado acierto el 'Ecce
Homo', una pintura de finales del siglo XIX.
La señora Cecilia, de buena
fe y a partir de sus conocimientos pictóricos, intentó corregir el
desgaste con que el tiempo había dañado a la obra. Ella afirma que no le
han dejado terminar su proyecto, pero todo parece indicar que a pesar
de la buena intención, el resultado no es ni habría sido el deseable.
Bien, seguramente la señora Cecilia se ha equivocado y, seguramente
también los mecanismos de seguridad del santuario donde se encuentra la
obra no han acabado de funcionar.
Pero el linchamiento del que ha sido objeto esta señora ha sido una
exhibición más de la peor España, de cómo los cobardes y los miserables
se aprovechan de la impunidad y del anonimato de las redes sociales para
atreverse siempre con el más indefenso y del más débil. Señora Cecilia:
Dios la quiere más de lo que usted cree y el Cielo guarda siempre un
lugar para los que con buena voluntad intentan mejorar el mundo aunque a
veces yerren.
No sé qué piensan de sus bromitas y de su crueldad estos twitteros
tan valientes ahora que han conseguido que una señora de más de 80 años
de edad tenga que guardar cama por culpa del ataque de ansiedad que le
han provocado.
Me gustaría conocer la vida de estos cobardes, saber qué han
intentado mejorar, o qué cosas han intentado hacer por los demás o en
beneficio de la comunidad. Me gustaría tener un informe detallado acerca
de su honradez y de su integridad, algún indicativo de su sentido del
honor y de la generosidad.
Estoy convencido de que obtendría material para poder escribir
cientos de tweets graciocísimos el resto de mis días. Y todos los
firmaría, como todo lo que escribo, y por todos daría la cara y de nadie
ni de nada me escondería.
Me parece vergonzoso lo que se le ha hecho a la señora Cecilia. Yo
soy Cecilia, por todas las veces que he intentado arreglar algo y lo he
estropeado, por todos los momentos en que queriéndome alzar nada he
alcanzado, por todas las buenas ideas con que he hecho el ridículo y he
fracasado. Cecilia soy yo y me gustan las personas como ella, con su
ternura y su bondad.
Cecilia es una de los nuestros, una que ha tenido el mérito y el
valor de haberlo intentado, aunque haya caído en desgracia y la turba se
haya reído de ella y la haya humillado. No sufras más, Cecilia, no
tengas miedo. Tuyo será el Reino de los Cielos.