“La situación de
crisis generalizada que vivimos en la situación política del país
nos hace estremecer al mismo tiempo que crece nuestra suspicacia
hacia quienes insisten en un “lavado de cara y de acción” en
nuevas generaciones de políticos que aparecen y crecen alrededor
como abanderados de la regeneración de un sistema, que al menos en
mi opinión, está podrido.
Ya no sabemos si lo que
mueve a algún ciudadano de nuestros pueblos, es la expresión de una
vocación de servicio – anteriormente no manifestada – o su afán
de conseguir introducirse en el sistema con la garantía del hecho
diferencial y la expresión subrayada de “que nosotros somos
éticos”.
Los ciudadanos ya no
somos tontos y antes de comprometer nuestro voto, investigamos quien
hay detrás de cada alternativa y desde luego si un candidato solo
puede presumir de su ostentosa posición, aun cuando esté cobrando
el paro, caeremos en la tentación de pensar mal, cuando su carnet está unido a sus tres coches, o a la motocicleta ostentosa...
Ya no sirven aquellas
antiguas imágenes de partidos y movimientos “progres”, como
“chaqueta de pana” del ilustre Felipe Gonzalez “forrado” en
un país de agobio económico y penuria.
La acción política en
los pueblos tiene que ser protagonizada por personas honestas y con
trayectorias de servicio a su comunidad, que no les importe
obstaculizar el camino a “los nuevos oportunistas” de la “tercera
vía”.
Dario Pozo Ruz. Valdepeñas